
Entre dichas prerrogativas hay dos que nos llaman notoriamente la atención: La primera: “Los miembros de los Órganos de Cajasur se reservaban el 5 por ciento de los contratos. Cada convocatoria de plazas establecía una cuota para que políticos y canónigos facilitaran una plaza a familiares sin examen.”
La segunda prerrogativa y no por ello menos importante que nos llama especialmente la atención son los pingües beneficios que se repartieron los 21 vocales del Consejo de Administración: 1.076.922€ entre los años 2008 y 2009.
Concretamente nuestro Alcalde en el año 2009 consiguió colocarse en el ranking número 4 de los vocales mejor pagados con la nada despreciable cantidad de 34.386€. Todo un ejemplo para atajar la crisis desde una Caja de Ahorros entre cuyo objeto social figuraba de manera explícita “la ausencia de ánimo de lucro” y el “fin social”. (Seguiremos informando).

